Resumen de la jornada “¿Son compatibles los estudios con una carrera deportiva de élite?

El pasado 30 de Junio 2011 tuvo lugar la Mesa Redonda“¿Son compatibles los estudios con una carrera deportiva de élite?” organizada por la Sección de Psicología del Deporte del Colegio Oficial de Psicólogos de Cataluña, que resumimos aquí.

En esta sesión se reflexionó sobre la compatibilidad de una dedicación a la carrera deportiva profesional y la continuidad de los estudios académicos y profesionales.

Participaron:

  • Oliver Martínez. Psicólogo deportivo. Presidente de la Sección de Psicología del Deporte del COPC
  • Alfredo Coco. Directivo. Expresidente del Club de Tenis La Salut. Exdirector Deportivo del Club de Tenis Pamplona. Campeón de España de Tenis y Pádel
  • Manolo Orantes. Tenista profesional de élite con 33 títulos individuales. Fundador y director de la escuela de tenis Future Pros.
  • Lluís Corretja. Padre de deportista de élite (Àlex Corretja) y profesor. Presidente de la Penya Blaugrana Xavi. Vicepresidente del Club de Tenis Vall Parc.
  • Anna Ros. Licenciada en Psicología y PDG Iese. Especializada en la gestión del talento. Directora General de KTC&R Global. Vocal de la Junta Directiva de la Federación Catalana de Tenis. Vicepresidenta de la Sección de Psicología del Deporte del COPC

Se puso a USA como ejemplo de lugar donde es posible compatibilizar el mundo académico y el deportivo.

Manolo comenta que los profesionales saben identificar cuando es necesario abandonar los estudios. Especialmente en el tenis, la decisión suele tomarse muy pronto, cuando se inician en competiciones internacionales y deben viajar habitualmente. Los deportistas maduran prematuramente, salen pronto del hogar familiar. En esta situación, cuando disponen aún de pocas experiencias vitales y menor posibilidad de contrastar, tienen mayor dependencia de su entorno familiar y profesional, y de su capacidad y valores.

Los jóvenes que no consiguen llegar a ser de élite

Se comenta que en ocasiones los deportistas y/o sus padres buscan la opinión del profesional que quieren oir. Los padres proyectan, en ocasiones, sus ilusiones y expectativas en los hijos. Esto conlleva que en ocasiones no se acepte fácilmente que no llegará a ser un deportista de élite, a pesar de que para el entorno profesional pueda ser fácilmente identificable.

Se someten a un desgaste físico importante, con muchas horas dedicados a entrenarse, torneos internacionales para acumular puntos para optar a los grandes torneos, viajando solos,… en lugar de admitir que sería mejor renunciar a estar en el top100.

La conciencia y aceptación suele llegar demasiado tarde y con una alta frustración, habiendo hecho sacrificios por el camino, como la continuidad de los estudios.

Se toman prematuramente decisiones, a veces más en función de lo que nos gustaría que de lo que es.

La edad crítica, los 16 años. Los chicos están acostumbrados a viajar y a ganar dinero. Es difícil admitir que hay que pasar al anonimato y a estudiar. A la propia presión, se le suma la del entorno familiar.

“Entras en un restaurante y ya no te dejan la mesa, eres transparente.”

Saber aceptar dejar de ser el centro de atención y aceptar que él éxito y la fama son algo pasajero.

Diversos intereses enfrentados

Cada institución (escuela, club) mira por su interés (escolar, deportivo). El entrenador quiere resultados, y no siempre mira por el bien del menor a futuro.

Los padres deben tomar las riendas en interés del menor. Ello exige una alta capacidad emocional y saber controlar la presión y las propias expectativas y emociones. Deben concienciarles que a pesar de estar ganando, aún no han conseguido nada relevante, hacerles conscientes de la temporalidad y provisionalidad de la situación.

Compatibilidad estudios y deporte

El sistema hace muy complicado compatibilizar ambos mundos ahora, aunque debemos trabajar para que sí sea posible.

Horarios obligatorios en Primaria y Secundaria, poca flexibilidad. Es obligatorio estar en la escuela durante todo el horario lectivo, a jornada completa, lo que dificulta compatibilizar los horarios escolares con los entrenamientos y los viajes. No es posible convalidar asignaturas como la educación física,…

Excepto en los centros especialmente adaptados y habituados a estos alumnos, en el resto de centros parece necesario pelearse continuamente con el sistema para intentar una mayor compatibilidad.

Se citan algunas escuelas de Barcelona en las que se trabaja en esta línea: Escola Virolai, Escola Leon XIII. En estas escuelas es posible realizar jornada intensiva de mañana. Los niños acogidos al Programa ARC, convalidan algunas asignaturas a partir de la ESO y tienen la posibilidad de flexibilizar exámenes según dedicación y viajes. La Federación actúa también como mediadora con el colegio.

En los deportes en los que es más difícil vivir económicamente de ello, a pesar de estar en la élite, tienen más claro que deben compatibilizarlo con los estudios, por ejemplo, en la natación.

Estudiar es la apuesta más segura, dado que sólo una minoría alcanza un nivel profesional de élite, y sólo durante un corto período de tiempo.

Anna reflexiona sobre la importancia de dotar de recursos a las personas para enfocar mejor su futuro, proporcionarles alternativas, planes B. Proporcionar cultura, además de oportunidades brinda mayor libertad, la no cultura nos hace más dependientes.

Es importante mantener los estudios al menos hasta una formación de grado medio, a ser posible realizar la selectividad, tener una base y un hábito de estudio consolidado, que luego facilite retomar.

Debería ser posible explotar más las nuevas tecnologías, y facilitar la formación a distancia; así como reducir los tiempos de entrenamiento en 3-4 horas diarias aprovechadas al máximo, en lugar de 7-8 horas, como se hace en algunos casos.

Algunos de los Roles del Psicólogo del Deporte

Como se ha dicho, la decisión suele tomarse demasiado pronto y no siempre desde la objetividad y visión global del bien del menor. El psicólogo debe ayudar a los padres a ver la situación con mayor perspectiva y objetividad, y a guiarse no sólo por el corto plazo, sino también por el medio y el largo.

El psicólogo también debe actuar como fomentador de ventajas: llevar la presión al lado positivo desde el principio de la carrera deportiva. Analizar los partidos y re-visualizarlos. Trabajar cómo se pierde y cómo se gana, para fomentar la resiliencia: no sentirse defraudado por perder, aprender a jugar en su mayor capacidad, focalizarse en lo que depende de ellos, en hacer las cosas lo mejor posible, y en aceptar la temporalidad de la situación en caso de éxito.

El psicólogo puede también ayudar a fomentar las competencias necesarias para un buen deportista. Competencias como el esfuerzo continuo, la automotivación, la resiliencia, la capacidad para remontarse ante la dificultad, el error y el fracaso, la resistencia a la presión,… son clave para alcanzar el éxito en el entorno deportivo, y muy útiles para el entorno educativo, social y laboral.

Sin embargo, se produce en la actualidad una “selección natural”: no se desarrolla la fortaleza mental, sino que sólo llegan al deporte de élite los que además de una buena condición física tienen una buena condición mental. Sin embargo, ésta no se desarrolla y la física sí. El rol del psicólogo deportivo está poco implantada, es el propio entrenador el que habitualmente ejerce este rol.

Fotos de roshibaba y cohdra en Morguefile

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